Tengo esta premonición, me da la espina de que seguís pendiente de mí. Y quizás haya enloquecido en este tiempo intentando no pensar en eso, haciéndome a la idea de que las cosas han terminado para aceptarlo y poder soltarte, dejar que tus recuerdos se vayan con el viento frío que acontece cuando el sol se oculta pero de alguna forma, cuando venís a mi mente, y conociéndote como te conozco, sé que no podrías dejarme así como así. Sé que te dolió hacerlo, sé que me seguís queriendo como yo a vos y eso te mantiene vivo en mí. Si bien muchas cosas tuyas han quedado en el tiempo, mantengo tu esencia conmigo, para que, cuando decidas volver te reconozca a lo lejos y al mirarte a los ojos pueda saber que muy en el fondo, seguís siendo el que conocí, aquel chico con esa mirada profunda que cuando sonreía podía hacer que hasta las estrellas brillaran a plena luz del día.
-
Te sigo queriendo, ¿qué sentido tiene negarlo? No voy a borrarte nunca de mí, sólo espero que vos tampoco lo hagas.
-
Te sigo queriendo, ¿qué sentido tiene negarlo? No voy a borrarte nunca de mí, sólo espero que vos tampoco lo hagas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario